Menos del 5% de los fibroadenomas aumentan de tamaño y alrededor del 25% se reducen o desaparecen por completo.
Sin embargo, la dificultad del tratamiento estriba en garantizar que no se pase por alto el cáncer de mama, y algunos abogan por que se extirpen todos los bultos de este tipo, con lo que se consigue tanto el diagnóstico como el tratamiento.
Otros, sin embargo, sostienen que para las mujeres menores de 40 años, con un fibroadenoma diagnosticado clínicamente, con ecografía y con citología por aspiración con aguja fina, la extirpación no es necesaria a menos que el bulto tenga más de 4 cm de diámetro. En el caso de las mujeres mayores de 40 años, deben extirparse todos los bultos.
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