La gangena seca se produce cuando los tejidos se desecan por una disminución gradual de su riego sanguíneo, lo que suele ocurrir en una extremidad crónicamente isquémica debido a la aterosclerosis. El tejido necrótico se vuelve negro, seco, arrugado y grasiento al tacto. Hay una línea de separación claramente definida entre el tejido muerto y el viable. La infección es mínima.
Con el tiempo, la zona necrótica se separa del tejido viable y la piel cicatriza lentamente el defecto.
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