Los cuidados rutinarios del paciente postoperado varían mucho en función de la operación; sin embargo, existen algunos principios subyacentes que pueden formalizar el pensamiento en este ámbito. El objetivo subyacente es casi siempre una recuperación cómoda y sin dolor de la intervención.
- monitorización, principalmente del pulso y la tensión arterial, pero también de la temperatura, la frecuencia respiratoria, la diuresis y el nivel de consciencia, según las circunstancias
- alivio del dolor: la mejora del sueño y del bienestar psicológico acelera la recuperación
- el equilibrio de líquidos, que debe controlarse adecuadamente con tablas de líquidos. Los efectos de la cirugía y de la ingesta de líquidos por vía intravenosa deben medirse con un hemograma completo regular, urea y electrolitos.
- tener cuidado con las complicaciones y gestionarlas adecuadamente
- alteración de las dosis y de la vía de administración de los medicamentos; por ejemplo, reducción de las dosis de corticoides intravenosos, interrupción de los antibióticos intravenosos
- movilización adecuada, que debe realizarse en estrecha colaboración con el personal de enfermería y fisioterapia
- medidas respiratorias, por ejemplo, oxígeno, broncodilatadores y fisioterapia torácica
Páginas relacionadas
Crear una cuenta para añadir anotaciones a la página
Añada a esta página información que sería útil tener a mano durante una consulta, como una dirección web o un número de teléfono. Esta información se mostrará siempre que visite esta página