Para pasar una sonda nasogástrica:
- sentar al paciente
- medir la distancia necesaria desde la nariz hasta el epigastrio con una sonda de calibre 16 a 20
- lubricar el extremo de la sonda
- dar hielo al paciente para que lo chupe
- introducir la sonda en la nariz del paciente
- pasarla suavemente hacia atrás, pidiendo al paciente que trague
- empujar la sonda la distancia medida, aspirar hacia atrás y comprobar las secreciones con papel de pH - debe ser ácido.
- inyectar rápidamente 20 ml de aire por la sonda mientras se escucha por encima del estómago un sonido de gorgoteo
Si el procedimiento falla, puede utilizarse un tubo de menor diámetro. Otra posibilidad es utilizar una sonda de mayor diámetro o una sonda conservada en el frigorífico para obtener la rigidez adicional necesaria para el paso. Una vez confirmado que la sonda está en el estómago, se sujeta con cinta adhesiva.
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