El diagnóstico suele ser clínico (1).
Los raspados presentan fluorescencia de color amarillo brillante a naranja cobrizo/dorado bajo la lámpara de Wood (1,2).
- sólo se observa en un tercio de los casos
- ayuda a diferenciar esta enfermedad del vitíligo
- a menudo, las zonas adyacentes a las lesiones también pueden presentar fluorescencia, lo que indica la propagación de la infección (2)
Las muestras de escamas de piel pueden utilizarse para confirmar el diagnóstico: tienen un aspecto de "espaguetis y albóndigas" (presencia tanto de hifas como de esporas) en el examen con hidróxido de potasio. El cultivo de hongos no es útil en esta enfermedad porque el organismo forma parte de la flora normal y su aislamiento no demuestra patogenicidad (2,3).
Tratamiento
Los preparados tópicos se utilizan con frecuencia e incluyen agentes antifúngicos tanto inespecíficos como específicos.
- Agentes inespecíficos: actúan eliminando física o químicamente el estrato córneo infectado sin tener actividad antifúngica directa (1). - Por ejemplo
- suspensión de sulfuro de selenio (2,5%) - champú Selsun -
- aplicar una vez al día en las zonas afectadas, dejar actuar durante 10 -15 minutos; antes de aclarar a fondo de
- se utiliza durante 7 días
- es un tratamiento eficaz, pero a algunos pacientes no les gusta el olor - se trata de una indicación no autorizada (1)
- propilenglicol - es un agente queratolítico utilizado a menudo como base en otras preparaciones tópicas, pero ha demostrado ser eficaz
- agentes antimicóticos tópicos específicos
- crema de miconazol - especialmente si los parches son limitados - se aplica una vez al día durante tres semanas
- el ketoconazol es el agente tópico más utilizado (1)
- disponible en forma de crema o champú. El champú de ketoconazol al 2% ha demostrado ser eficaz cuando se aplica diariamente durante 1, 3 ó 14 días (1)
- la terbinafina, una alilamina que se ofrece en forma de crema o aerosol al 1%, también ha dado buenos resultados cuando se aplica dos veces al día durante 7 días (3)
El tratamiento sistémico debe reservarse para los pocos pacientes con enfermedad muy extensa. Un régimen adecuado es itraconazol 200 mg al día durante siete días. La griseofulvina y la terbinafina oral suelen ser ineficaces en esta afección (3). La terapia sistémica con ketoconazol también es una opción de tratamiento (3,1).
La infección suele provocar hipopigmentación de la piel. La hipopigmentación asociada a esta infección puede persistir durante meses tras el éxito del tratamiento (3,1) y un error común es confundirla con una recaída. Advierta a los pacientes de que el color de la piel tardará varios meses en volver a su estado original; en ocasiones, la decoloración puede ser muy persistente (4). La erradicación exitosa puede no confirmarse hasta que se produzca un nuevo bronceado de la piel.
- Aunque puede conseguirse una curación micológica, es posible que la pigmentación normal de las zonas afectadas no regrese hasta meses después del cese del tratamiento. Se debe aconsejar a los pacientes que eviten la exposición prolongada al sol durante este tiempo, ya que el bronceado aumentará el contraste entre las zonas afectadas y la piel normal.
- La recurrencia de la tiña versicolor no es infrecuente. Para los pacientes con recaídas frecuentes, puede ser necesario un tratamiento profiláctico. Entre las opciones eficaces se incluyen tratamientos mensuales de itraconazol oral (una única dosis de 400 mg) (3); además, el paciente debe seguir utilizando el champú de ketoconazol una vez cada dos o cuatro semanas durante aproximadamente seis meses para intentar prevenir la recidiva (4).
Referencias: