Siempre debe consultarse el calendario de la vacuna en cuestión antes de proceder.
- La vacuna se administra por vía intramuscular en la región deltoidea. No debe utilizarse la nalga, ya que reduce la eficacia de la vacuna, pero puede utilizarse la cara anterolateral del muslo.
- el estado inmunitario se comprueba 1-2 meses después de la tercera dosis de vacuna. Los niveles de anticuerpos (anti-HBS) definen la intervención posterior
- se presenta un ejemplo de calendario de vacunación en función del resultado del nivel de anticuerpos tras la vacunación primaria
Existen muchos calendarios de inmunización diferentes para la vacuna contra la hepatitis B, que dependen del producto vacunal utilizado y de la rapidez con que se necesite la protección antes o después de la exposición.
Pruebas de respuesta a la vacunación
Las vacunas contra la hepatitis B son muy eficaces; alrededor del 90% de los adultos responden adecuadamente a las vacunas.
Las respuestas deficientes se asocian sobre todo a la edad superior a 40 años, la obesidad y el tabaquismo.
- también se han notificado tasas de seroconversión más bajas en personas con dependencia del alcohol, en particular las que padecen una enfermedad hepática avanzada
- los pacientes inmunodeprimidos o sometidos a diálisis renal pueden responder peor que las personas sanas y requerir dosis mayores o más frecuentes de vacuna
- la vacuna no es eficaz en pacientes con hepatitis B aguda, y no es necesaria en personas que presenten marcadores de infección actual (HBsAg) o pasada (anti-HBc). Sin embargo, la inmunización no debe retrasarse a la espera de los resultados de las pruebas de infección actual o pasada.
- no se recomiendan de forma rutinaria las pruebas de inmunidad tras la inmunización (anti-HBs), aunque son necesarias para determinados grupos de riesgo, por ejemplo, aquellos con exposición ocupacional.
Personas con riesgo de exposición profesional
- en las personas con riesgo de exposición profesional, en particular los trabajadores sanitarios y de laboratorio, los títulos de anti-HBs deben comprobarse uno o dos meses después de la finalización de un ciclo primario de vacunación
- en virtud de la normativa sobre el control de sustancias peligrosas para la salud (COSHH), los trabajadores tienen derecho a saber si están protegidos o no
- esta información permite tomar decisiones adecuadas sobre la profilaxis postexposición tras una exposición conocida o sospechada al virus
- la respuesta de los anticuerpos a la vacuna contra la hepatitis B varía mucho de una persona a otra
- es preferible alcanzar niveles de anticuerpos anti-HBs superiores a 100mIU/ml, aunque generalmente se acepta que niveles de 10mIU/ml o más son suficientes para proteger contra la infección
- algunos ensayos anti-HBs no son particularmente específicos en los niveles más bajos, y los niveles anti-HBs de 100mIU/ml proporcionan una mayor confianza de que se ha establecido una respuesta específica
Evaluación de la respuesta a la vacuna contra la hepatitis B:
- los respondedores con niveles de anti-HBs superiores o iguales a 100mIU/ml no necesitan más dosis primarias
- en individuos inmunocompetentes, una vez establecida la respuesta, no está indicado seguir evaluando los niveles de anticuerpos
- los respondedores con niveles de anticuerpos anti-HBs de 10 a 100mIU/ml
- deben recibir una dosis adicional de vacuna en ese momento
- en individuos inmunocompetentes, no está indicado seguir evaluando los niveles de anticuerpos
- actualmente se aconseja ofrecer a los trabajadores sanitarios y de laboratorio una dosis única de refuerzo de la vacuna, una sola vez, cinco años después de la inmunización primaria
- nivel de anti-HBs inferior a 10mIU/ml
- se clasifica como no respuesta a la vacuna, y la realización de pruebas para detectar marcadores de infección actual o pasada es una buena práctica clínica
- en los no respondedores, se recomienda repetir la administración de la vacuna, seguida de una nueva prueba uno o dos meses después de la segunda administración
- aquellos que todavía tengan niveles de anti-HBs por debajo de 10mIU/ml, y que no tengan marcadores de infección actual o pasada, necesitarán HBIG para protegerse si se exponen al virus (1)
Notas:
- en la insuficiencia renal crónica
- la protección puede persistir sólo mientras los niveles de anti-HBs se mantengan por encima de 10mIU/ml. Por lo tanto, los niveles de anticuerpos deben controlarse anualmente y, si caen por debajo de 10mIU/ml, debe administrarse una dosis de refuerzo de la vacuna a los pacientes que hayan respondido previamente a la vacuna (1).
- se han detallado otras orientaciones sobre cómo gestionar una respuesta anti-HBS inferior a 10 iu por litro (2)
- si el nivel de anti-HBS es inferior a 10 iu por litro, compruebe el anticuerpo central (anti-HBC)
- si el anti-HBC es positivo, indica una infección por VHB en el pasado
- si el anti-HBC es negativo, repetir o completar el segundo ciclo completo acelerado. Se puede lograr una respuesta mediante el uso de una vacuna de dosis más alta.
- si no hay respuesta y el anti-HBC es negativo, se debe advertir al paciente que no es inmune y que necesitará inmunoglobulina específica contra la hepatitis B tras una exposición de alto riesgo
- si hay respuesta (>= 10 iu por litro), el paciente necesita una dosis de refuerzo 5 años después.
Referencia:
- El Libro Verde. Capítulo 18 - Hepatitis B (Abril 2019)
- Prescriptor (2000), 11, (7), 45-54.