El control clínico de la profundidad de la anestesia se basa en la presencia de reflejos autonómicos:
- oftálmicos:
- tamaño de la pupila, que se reduce al aumentar la profundidad, pero puede dilatarse en anestesia muy profunda
- los opioides y los anticolinérgicos alteran el tamaño de la pupila por una acción central y, por lo tanto, hacen que este índice sea menos válido
- cardiovascular:
- se sigue la tendencia de la frecuencia cardiaca y de la presión arterial
- puede verse modificado por fármacos, hemorragias y anomalías de los fluidos corporales
- respiratorio:
- la tendencia de la frecuencia, la profundidad y la ritmicidad de la respiración
- efecto de la ventilación
- el hipo o el broncoespasmo pueden indicar una anestesia ligera
- cutánea:
- la sudoración puede ser un signo de anestesia ligera; se reduce con agentes anticolinérgicos
- color: buena perfusión indicada por un tono rosado
- tiempo de relleno capilar; índice indirecto de perfusión tisular
- temperatura; especialmente importante en lactantes
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