La bursitis suprapatelar se produce por encima de la rótula
- la bursa suprapatelar se extiende hacia arriba desde debajo de la rótula, por debajo del músculo cuádriceps
- es vulnerable a lesiones tanto por traumatismos agudos como por microtraumatismos repetidos
- las lesiones agudas se producen por un traumatismo directo en la bursa al caer directamente sobre la rodilla
- los microtraumatismos pueden producirse por lesiones por uso excesivo, o por trabajos en los que se ejerce una presión repetida sobre las rodillas, como la colocación de alfombras
- una infección puede provocar una bursitis suprapatelar
Los factores que pueden contribuir a la bursitis de rodilla incluyen:
- traumatismos o golpes directos en la rodilla
- caídas frecuentes sobre la rodilla
- presión repetida sobre la rodilla (por ejemplo, en actividades que impliquen periodos prolongados de arrodillamiento) o traumatismos menores repetitivos en la rodilla
- la artritis de rodilla puede asociarse a la bursitis, por ejemplo, gota, artritis reumatoide y osteoartritis.
Las características clínicas incluyen
- inflamación suprapatelar - puede ser clínicamente difícil de diferenciar de la inflamación prepatelar
- puede haber limitación de la movilidad de la rodilla
- puede haber eritema y calor en la bursitis séptica y secundaria a la gota
- puede haber dolor de rodilla
- en la bursitis la inflamación se produce en la bursa, no en la articulación de la rodilla
- hay una diferencia importante entre la acumulación de líquido dentro de la bursa y dentro de la articulación de la rodilla
- los síntomas de la bursitis de rodilla suelen agravarse al arrodillarse, agacharse, flexionarse repetidamente o ponerse en cuclillas, y los síntomas pueden aliviarse al permanecer sentado
Diagnóstico:
- A menudo clínicamente
- una resonancia magnética o una ecografía son las pruebas más eficaces para un diagnóstico definitivo
- análisis de sangre, como hemograma, PCR o ácido úrico, que pueden ayudar a identificar otros factores etiológicos
Tratamiento:
- el tratamiento depende de si se trata de una bursitis séptica o no séptica
- tratamiento conservador - medidas generales
- reposo, hielo y reducción de la actividad
- considerar la analgesia como el paracetamol o un antiinflamatorio no esteroideo como el ibuprofeno
- evitar traumatismos en las rodillas, pero si no es posible, sugerir rodilleras protectoras
Bursitis no séptica
- tratamiento médico
- aspiración de la bursa e inyección de un corticosteroide - sólo indicado en caso de bursitis no séptica
- tratamiento quirúrgico
- puede estar indicado si es crónica o recurrente
- las opciones quirúrgicas incluyen:
- bursectomía artroscópica
- bursectomía abierta
Bursitis séptica
- la bursitis séptica suele tratarse con éxito de forma no quirúrgica con reposo, compresión, inmovilización, aspiración y antibióticos (1)
- si se sospecha una bursitis séptica
- tratar empíricamente con un antibiótico oral que cubra las especies estafilocócicas y estreptocócicas hasta que se conozcan los resultados del cultivo
- dosis para adultos
- flucloxacilina (500 mg cuatro veces al día) es el antibiótico preferido. Puede utilizarse eritromicina (500 mg cuatro veces al día) si la persona es alérgica a la penicilina, o claritromicina (500 mg dos veces al día) si la eritromicina se tolera mal
- si el paciente está inmunodeprimido, consultar a un especialista
- la incisión y el drenaje de la bursa pueden estar indicados si no se ha producido una mejora significativa de la afección después de 36-48 horas
- es necesario realizar revisiones periódicas para orientar el tratamiento