Los corticoides tópicos, como las gotas de betametasona, son eficaces en más del 80% de los pacientes con pólipos nasales simples (1). La absorción sistémica es mínima y los efectos secundarios son escasos. Los corticoides se administran mejor inicialmente en forma de gotas con el paciente inclinado hacia delante adoptando la posición de "meca" para administrarlos. Así se garantiza que las gotas lleguen a las celdillas etmoidales.
Si existe preocupación por los posibles efectos sistémicos de la betametasona, el tratamiento puede cambiarse al cabo de unas seis semanas por uno de los esteroides tópicos que no se absorben sistémicamente, como la beclametasona (1).
En casos graves de poliposis nasal, pueden utilizarse esteroides sistémicos en dosis cortas reductoras.
Los corticoides tópicos también pueden utilizarse en el postoperatorio para reducir las recidivas.
Referencia: The Practitioner (1997), 241, 620.
Añada a esta página información que sería útil tener a mano durante una consulta, como una dirección web o un número de teléfono. Esta información se mostrará siempre que visite esta página