La propagación de la infección se produce habitualmente a través de grandes gotas y aerosoles que contienen virus (al toser, estornudar o hablar) y por propagación indirecta a partir de secreciones respiratorias en manos, tejidos, etc. (1,2).
Con menor frecuencia, puede propagarse a través de fómites contaminados. Los niños desempeñan un papel importante en la propagación de la enfermedad dentro de las comunidades y los hogares:
El nivel de diseminación del virus es mínimo antes del inicio de los síntomas y continúa durante 5-10 días después del comienzo de la enfermedad (el pico de diseminación del virus se observa desde 1 día antes del inicio de los síntomas hasta 3 días después del inicio) (1).
Pocos pacientes pueden contraer la infección y transmitirla sin mostrar síntomas (o con síntomas muy leves) (2).
Referencias:
Añada a esta página información que sería útil tener a mano durante una consulta, como una dirección web o un número de teléfono. Esta información se mostrará siempre que visite esta página