Es más probable que se produzcan desgarros perineales con:
- parto precipitado
- distocia de hombros
- con partos con fórceps
- arco suprapúbico estrecho
- bebés grandes
- bebés con cabeza poco flexionada
La lesión perineal sigue siendo la forma más común de lesión obstétrica materna y tradicionalmente se ha clasificado en primer, segundo y tercer grado (en el Reino Unido, un desgarro de tercer grado sólo se registraba si el esfínter anal estaba completamente roto y la mucosa rectal perforada. En EE.UU., un desgarro que afectaba al esfínter anal en cualquier grado se clasificaba como de tercer grado, y uno que afectaba a la mucosa rectal se denominaba de cuarto grado). La clasificación utilizada en el Reino Unido se ha actualizado y ahora distingue entre desgarros de primer, segundo, tercer y cuarto grado (1):
- Desgarro de primer grado: desgarro que afecta únicamente a la piel perineal o vaginal.
- Desgarro de segundo grado: desgarro de la piel y los músculos perineales, pero esfínter anal intacto.
- Desgarro perineal de tercer grado: desgarro de la piel perineal, los músculos y el esfínter anal.
- a. Menos del 50% del espesor del esfínter anal externo está desgarrado
- b. Desgarro de más del 50% del espesor del esfínter anal externo, pero esfínter anal interno intacto
- c. Desgarro tanto del esfínter anal externo como del interno, pero mucosa anal intacta
- Desgarro perineal de cuarto grado: la piel perineal, los músculos, el esfínter anal y la mucosa anal están desgarrados.
- Desgarro en ojal: el esfínter anal está intacto, pero la mucosa anal está desgarrada.
Anatómicamente, una episiotomía afecta a las mismas estructuras que un desgarro perineal de segundo grado.
El tratamiento depende del tipo de desgarro:
Los principios generales de tratamiento son
- desgarro labial - incómodo; cicatriza rápidamente; raramente requiere sutura
- desgarro de primer grado - superficial; no afecta al músculo; puede no requerir sutura si la pérdida de sangre es mínima
- desgarro de segundo grado: afecta al músculo perineal y requiere sutura
- desgarros de tercer y cuarto grado - requieren reparación por un cirujano experimentado
Notas:
- una revisión sistemática (2) observó que los limitados datos disponibles mostraban que, en comparación con la reparación primaria inmediata de extremo a extremo de las lesiones obstétricas del esfínter anal, la reparación primaria temprana superpuesta parecía asociarse a un menor riesgo de síntomas de urgencia fecal e incontinencia anal. Sin embargo, la revisión observó que la experiencia del cirujano no se abordó en los estudios revisados y, por lo tanto, sería inapropiado recomendar un tipo de reparación en favor de otro
- en la mayoría de los casos se mantiene un desgarro de primer o segundo grado - las secuelas graves son infrecuentes
- los desgarros del esfínter anal son relativamente infrecuentes en cualquier sala de partos
- la incidencia comunicada varía considerablemente, pero suele situarse entre el 0,5% y el 2,5% de los partos vaginales
- los desgarros del esfínter anal son un importante factor de riesgo de disfunción del esfínter anal a largo plazo
- hasta el 60% de las mujeres que sufren un desgarro del esfínter experimentan síntomas de dispareunia, dolor perineal o incontinencia anal
Referencia:
- Fernando RJ, Sultan AH. Factores de riesgo y tratamiento de las lesiones perineales obstétricas. Curr. Obs. & Gynae. 2004; 14 (5):320-326.
- Fernando R et al. Métodos de reparación de la lesión obstétrica del esfínter anal (Revisión Cochrane traducida). Cochrane Database Syst Rev. 2006 Jul 19;3:CD002866
- Byrd LM et al. ¿Es posible predecir o prevenir los desgarros de tercer grado? Colorectal Dis. 2005 Jul;7(4):311-8.