El uso de fórceps debe ser llevado a cabo por un operador experto y bajo los criterios descritos para el uso de fórceps. Si no se cumplen estos criterios, existe el riesgo de dañar a la madre o al feto.
Los posibles daños maternos incluyen
- laceraciones de la vagina y el cuello uterino
- rotura del útero
- formación de fístulas (rectovaginal, vesicovaginal)
- hemorragia posparto
Los posibles daños fetales incluyen:
- fractura del cráneo fetal y posterior hemorragia intracraneal y muerte
- parálisis facial debida a una aplicación imprecisa del fórceps
- daño cerebral
- hematomas faciales y/o parálisis facial (debido a una aplicación imprecisa de las hojas del fórceps); ambos suelen ser sólo temporales
Crear una cuenta para añadir anotaciones a la página
Añada a esta página información que sería útil tener a mano durante una consulta, como una dirección web o un número de teléfono. Esta información se mostrará siempre que visite esta página