En el recién nacido con luxación congénita de cadera, muchas se resuelven sin tratamiento en las primeras semanas de vida - el tratamiento se guía en parte por el uso de ultrasonidos para evaluar el grado de displasia acetabular.
La férula Von Rosen, acolchada y maleable, puede utilizarse en bebés pequeños hasta los 3 meses - mantiene las piernas flexionadas y abducidas, pero nunca más allá de la horizontal.
El arnés de Pavlik puede utilizarse en bebés mayores que hayan dominado el arte de salir gateando de la férula de Von Rosen. Por término medio, la ferulización dura de 6 a 8 semanas. Una vez obtenida la estabilidad, la férula puede retirarse, pero debe hacerse un seguimiento del niño para detectar la infrecuente luxación secundaria tardía.
Hay que tener cuidado para evitar la necrosis avascular, que se produce entre el 2 y el 20% de los casos.
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