Los antiestrógenos se utilizan en el tratamiento hormonal del cáncer de mama. El fármaco de referencia es el tamoxifeno, que es principalmente un antagonista de los receptores de estrógenos con cierta actividad agonista.
El tamoxifeno, tomado durante 5 años tras el tratamiento quirúrgico, es una parte estándar del régimen de tratamiento para mujeres posmenopáusicas con cáncer de mama con receptores hormonales positivos. Si se utiliza en este contexto, el tamoxifeno
- aumenta la proporción de mujeres que sobreviven al menos 10 años de un 50% a un 60% entre las que tienen afectación de los ganglios linfáticos
- aumenta del 73% al 79% la proporción de mujeres que sobreviven al menos 10 años sin afectación de los ganglios linfáticos
- reduce casi a la mitad el riesgo de desarrollar cáncer en la mama contralateral.
Referencia:
- Drug and Therapeutics Bulletin (2003), 41 (8), 57-59.
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