- hay pruebas de que la naltrexona es eficaz para prevenir el reinicio del consumo de alcohol en pacientes con dependencia del alcohol
- una revisión sistemática reveló que la naltrexona puede reducir el riesgo de abstinencia del tratamiento a corto plazo (1). La revisión concluyó que la naltrexona puede ser beneficiosa, junto con un tratamiento psicosocial intensivo, a medio y largo plazo.
- un ensayo controlado aleatorio que comparó el tratamiento médico con 16 semanas de naltrexona (100 mg/día) o acamprosato (3 g/día), ambos, y/o ambos placebos, con o sin una intervención conductual combinada (CBI). Otro grupo recibió únicamente CBI (sin pastillas). También se evaluó a los pacientes hasta 1 año después del tratamiento (2)
- Los pacientes que recibieron tratamiento médico con naltrexona, CBI o ambos obtuvieron mejores resultados en cuanto al consumo de alcohol, mientras que el acamprosato no mostró ninguna evidencia de eficacia, con o sin CBI. Ninguna combinación produjo mejor eficacia que la naltrexona o la CBI solas en presencia de tratamiento médico. Los comprimidos de placebo y la reunión con un profesional sanitario tuvieron un efecto positivo superior al de la CBI durante el tratamiento
- aspectos prácticos del uso de la naltrexona en la dependencia del alcohol (3)
- La duración del tratamiento es de 3 meses, aunque actualmente se está evaluando la evidencia para su uso a más largo plazo. Los beneficios pueden continuar después de dejar de beber
- los efectos secundarios incluyen náuseas, dolor de cabeza, necesidad de analgesia, disforia, hepatotoxicidad (por lo que es necesario comprobar las pruebas de función hepática a los 3 meses) (3)
- debe entregarse al paciente una tarjeta de advertencia para que la lleve consigo y avise a los equipos sanitarios de urgencias del bloqueo opiáceo. Las intervenciones psicosociales, como la terapia cognitivo-conductual y/o las habilidades de afrontamiento, son un componente esencial para la eficacia de esta medicación.
- la prescripción de este medicamento debe discutirse con un especialista en adicciones
- NICE afirma que (4):
- si se utiliza naltrexona oral, iniciar el tratamiento tras la abstinencia asistida
- comenzar la prescripción con una dosis de 25 mg al día y aspirar a una dosis de mantenimiento de 50 mg al día. Llamar la atención del usuario sobre la tarjeta informativa que se entrega con la naltrexona oral acerca de su impacto sobre los analgésicos opiáceos.
- la naltrexona oral debe
- recetarse normalmente durante un máximo de 6 meses, o más para las personas que se benefician del fármaco y desean seguir tomándolo
- dejar de tomarla si el consumo persiste 4-6 semanas después de empezar a tomarla
Los usuarios de servicios que tomen naltrexona oral deben permanecer bajo supervisión, al menos mensualmente, durante 6 meses, y a intervalos reducidos pero regulares si se continúa con el fármaco después de 6 meses. No utilice los análisis de sangre de forma rutinaria, pero considérelos para las personas mayores, para las personas con obesidad, para controlar la recuperación de la función hepática y como ayuda motivacional para que los usuarios del servicio muestren mejoría. Si el usuario del servicio se siente mal, aconséjele que deje la naltrexona oral inmediatamente. El consejo relativo a la monitorización de la función hepática difiere del RCGP, que afirma que las pruebas de función hepática deben comprobarse a los 3 meses (3).
Referencia: