La base teórica de esta forma de tratamiento es que los síntomas, ya sean sentimientos incómodos, pensamientos no deseados o comportamientos inadaptados, son respuestas aprendidas a circunstancias particulares. La teoría sugiere que si una forma de comportamiento puede aprenderse, entonces puede modificarse, ya sea invirtiendo el proceso de aprendizaje original o fomentando un sentimiento, pensamiento o comportamiento alternativo más constructivo.
En la teoría del comportamiento se han aplicado dos principios fundamentales de la teoría del aprendizaje:
- condicionamiento clásico - la modificación o anulación de síntomas molestos que han surgido en respuesta a un determinado estímulo
- condicionamiento operante - modelar respuestas más sanas y eficaces
Aunque estos dos principios de la teoría del aprendizaje se aplican en esta forma de terapia, es tanto la experiencia práctica del terapeuta sobre lo que resulta eficaz como los principios teóricos lo que resulta útil en el tratamiento de los pacientes.
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