Historia de la consulta de Debenham

Otley desde al menos la Primera Guerra Mundial. Durante la mayor parte del tiempo estos fueron de una sola mano y entre ellos cubrían el mismo territorio que el área de práctica actual. No se construyeron locales para la consulta hasta que Paddy Fielder creó el Debenham Surgery, que abrió sus puertas en 1983. Antes de esto, el Dr. Hutt ejercía en la antigua cocina de su casa particular en Debenham y en una cabaña anexa en Helmingham Estate. El Dr. Odlum ejercía en un bungalow sin convertir y sin calefacción en Otley, donde los pacientes esperaban en el garaje que se abría a la nieve durante el invierno. También utilizaba un salón privado en Grundisburgh, una habitación delantera en Tuddenham y una cocina en Witnesham. Los consultorios de Debenham y Otley se fusionaron en 1983 con la jubilación del Dr. Odlum y la llegada de Rob Grundy. En 1986 se inauguró un consultorio en Chapel Road, en el centro de Otley, después de dos años en un agradable y cálido portacabina junto al salón del pueblo, que proporcionaba las instalaciones de espera. El consultorio de Grundisburgh, en Charles Avenue, abrió sus puertas en 1994. Después de dieciocho meses en la taberna Dog, que ofrecía intimidad, comodidad e instalaciones para dispensar los medicamentos, y siete años en los salones parroquiales, donde se disponía de todas las instalaciones a pesar de que todo tenía que encerrarse en una sola habitación una vez terminadas las consultas: los apuntes, los medicamentos, la recepción, incluso el terminal informático y su impresora, se trasladaban al salón común, dejando la habitación del médico como una pequeña y ordenada sala de consulta y examen. Cuando el Dr. Hutt se jubiló a los 74 años, David Egan fue nombrado para gran alivio de Paddy y Rob. Con su apoyo entusiasta, se fue generando un tremendo impulso de cambio que dio como resultado nuestra aprobación como consultorio de formación, la informatización totalmente integrada, nuestro paso a la gestión de fondos y el aumento del tamaño de nuestras listas, lo que justificó la contratación de un cuarto médico. Continúa en la segunda parte.