Los testículos pueden inflamarse de forma aguda en una serie de enfermedades víricas, por ejemplo, las paperas, la mononucleosis infecciosa, la rubéola y la infección por el virus Coxsackie.
La orquitis por paperas es la más frecuente; entre el 15 y el 20% de los varones adultos que contraen paperas padecen orquitis. Es poco frecuente en varones antes de la pubertad.
Normalmente, la afectación testicular se produce entre 3 y 7 días después del aumento de tamaño de la parótida. En raras ocasiones, la orquitis es la única característica de las paperas. En el 15% de los casos, ambos testículos están afectados. Al principio, el testículo está inflamado y el epidídimo es normal. Más tarde, todo el escroto se inflama y se vuelve edematoso. La orina suele ser estéril. El diagnóstico se confirma por el aumento de los títulos de anticuerpos antiparotiditis.
El tratamiento consiste en reposo en cama, apoyo escrotal y analgesia. La atrofia testicular se produce en el 50% de los casos y, si es bilateral, puede causar esterilidad.
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