Los rayos gamma se utilizan como un tipo de irradiación de megavoltaje, siendo el cobalto 60, un isótopo radiactivo del cobalto 59, la fuente principal en medicina.
La fuente debe sustituirse cada 3 años, y durante su vida útil produce un haz de 1,2 MeV.
El cesio 137 se utiliza de forma similar en otras unidades.
Los rayos gamma son el resultado de la desintegración nuclear, en la que la energía vinculante se emite en forma de radiación electromagnética.
La intensidad máxima de la radiación se encuentra a una profundidad de 5 mm, tras la cual se produce la desintegración. La superficie recibe el 50% de la dosis de intensidad máxima.
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