La colitis ulcerosa afecta principalmente a la mucosa y la submucosa, con infiltrado de células inflamatorias, absceso de criptas y formación de úlceras. Las células caliciformes son poco numerosas y con frecuencia carecen de moco.
La mucosa redundante entre las úlceras forma pseudopólipos, y la mucosa es friable y sangra fácilmente al contacto.
No hay lesiones saltantes.
La afectación más frecuente es la del recto-sigmoide, con una afectación total del colon en el 50% de los pacientes.
La enfermedad crónica causa acortamiento y engrosamiento de la pared intestinal con pérdida de haustras.
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