Debe considerarse el apoyo nutricional en personas desnutridas, definidas por cualquiera de los siguientes factores
- un índice de masa corporal (IMC) inferior a 18,5 kg/m2
- pérdida de peso involuntaria superior al 10% en los últimos 3-6 meses
- un IMC inferior a 20 kg/m2 y una pérdida de peso involuntaria superior al 5% en los últimos 3-6 meses.
El apoyo nutricional debe considerarse en personas con riesgo de malnutrición que, según se define por cualquiera de los siguientes factores
- han comido poco o nada durante más de 5 días y/o es probable que coman poco o nada durante los próximos 5 días o más
- tienen una capacidad de absorción deficiente, y/o presentan pérdidas elevadas de nutrientes y/o tienen necesidades nutricionales aumentadas por causas como el catabolismo
Los profesionales sanitarios deben considerar el uso de soporte nutricional oral, enteral o parenteral, solo o en combinación, para las personas desnutridas o en riesgo de desnutrición, tal y como se ha definido anteriormente. Deben tenerse en cuenta los posibles problemas de deglución.
Detección de la desnutrición y del riesgo de desnutrición en el hospital y en la comunidad
- el cribado de la malnutrición y del riesgo de malnutrición debe ser realizado por profesionales sanitarios con las competencias y la formación adecuadas
- todos los pacientes hospitalizados en el momento de su ingreso y todos los pacientes ambulatorios en su primera consulta deben someterse a un cribado. El cribado debe repetirse semanalmente en el caso de los pacientes hospitalizados y cuando exista preocupación clínica en el caso de los pacientes ambulatorios.
- los servicios hospitalarios que identifiquen grupos de pacientes con bajo riesgo de malnutrición pueden optar por no realizar el cribado a estos grupos. Las decisiones de exclusión voluntaria deben seguir un proceso explícito a través de la estructura local de gobernanza clínica, con la participación de expertos en apoyo nutricional.
- las personas ingresadas en residencias de ancianos deben someterse a un cribado en el momento de su ingreso y cuando exista una preocupación clínica
- el cribado debe realizarse en el momento del registro inicial en las consultas de medicina general y cuando exista preocupación clínica. También debería considerarse la posibilidad de realizar el cribado en otras ocasiones (por ejemplo, controles de salud, inyecciones contra la gripe).
- el cribado debe evaluar el índice de masa corporal (IMC) y el porcentaje de pérdida de peso involuntaria, así como el tiempo durante el cual se ha reducido involuntariamente la ingesta de nutrientes y/o la probabilidad de que se produzcan alteraciones futuras en la ingesta de nutrientes.Para ello puede utilizarse, por ejemplo, la Herramienta Universal de Detección de la Malnutrición (MUST).
Indicaciones para la suplementación nutricional oral
- los profesionales sanitarios deben considerar el apoyo nutricional oral para mejorar la ingesta nutricional de las personas que pueden tragar con seguridad y están desnutridas o en riesgo de desnutrición, tal como se ha definido anteriormente
- los profesionales sanitarios deben asegurarse de que la ingesta total de nutrientes del apoyo nutricional oral ofrecido contenga una mezcla equilibrada de proteínas, energía, fibra, electrolitos, vitaminas y minerales
- si existe preocupación sobre la idoneidad de la ingesta de micronutrientes, los profesionales sanitarios con las competencias y la formación pertinentes en apoyo nutricional, capaces de determinar la idoneidad nutricional de la ingesta alimentaria de un paciente, deben considerar la posibilidad de administrar un suplemento multivitamínico y mineral completo por vía oral que proporcione la ingesta de nutrientes de referencia para todas las vitaminas y oligoelementos
- el apoyo nutricional oral debe interrumpirse cuando el paciente haya establecido una ingesta oral adecuada a partir de alimentos normales
Control y suspensión de la suplementación en caso de desnutrición
- las personas que reciben apoyo nutricional oral y/o alimentación enteral por sonda en la comunidad deben ser controladas por profesionales sanitarios con la formación y los conocimientos pertinentes en materia de control nutricional
- las personas deben ser controladas cada 3-6 meses o con mayor frecuencia si se produce algún cambio en su estado clínico
- algunas de las observaciones clínicas pueden ser comprobadas por los pacientes o sus cuidadores. Si la evolución clínica es satisfactoria, rara vez se necesitan pruebas de laboratorio.
Notas:
- los suplementos nutricionales orales (ONS) se utilizan normalmente como complemento de la dieta normal, cuando la dieta por sí sola es insuficiente para satisfacer las necesidades nutricionales diarias
- ONS
- no sólo aumentan la ingesta total de energía y proteínas, sino también la ingesta de micronutrientes
- no reducen la ingesta de alimentos normales
- son una forma clínica y rentable de tratar la desnutrición, especialmente entre las personas con un IMC bajo (IMC < 20 kg/m2)
- aumentan la ingesta de energía y proteínas, pueden mejorar el peso y tienen beneficios funcionales (por ejemplo, mejoran la fuerza de agarre de las manos)
- los beneficios de los SNO incluyen la reducción de las complicaciones (por ejemplo, úlceras por presión, mala cicatrización de heridas, infecciones) y de la mortalidad (en personas mayores con enfermedades agudas)
- los beneficios clínicos de los SNO se observan a menudo con: 300-900kcal/día (p.ej. 1-3 raciones de SNO al día) con beneficios observados en la comunidad normalmente con 2-3 meses de suplementación
- sin embargo, los periodos de suplementación pueden ser más cortos o más largos (hasta 1 año), según las necesidades clínicas.
Referencia:
- NICE. Apoyo nutricional para adultos: apoyo nutricional oral, alimentación enteral por sonda y nutrición parenteral. Guía clínica [CG32]. Publicada: Febrero 2006 Última actualización: Agosto 2017