La investigación hormonal inicial debe tener como objetivo excluir trastornos del eje hipotálamo-hipofisario-ovárico que causen alteraciones de la ovulación. Las mediciones deben realizarse idealmente en la primera semana del ciclo menstrual e incluir:
- testosterona, globulina fijadora del sexo, FSH, LH, PRL, TFT.
El diagnóstico de SOP se apoya en
- niveles elevados de testosterona libre (en saliva o plasma)
- niveles bajos de globulina fijadora de hormonas sexuales
- para calcular el índice de andrógenos libres (FAI), se divide el valor de testosterona total x 100 por el valor de globulina fijadora de hormonas sexuales (1)
- niveles de FAI iguales o superiores a 5 son indicativos de síndrome de ovario poliquístico (2)
- deben excluirse otros trastornos que presenten signos clínicos y/o bioquímicos de hiperandrogenismo, como la hiperplasia suprarrenal congénita, los tumores secretores de andrógenos o el síndrome de Cushing. Para ello, pueden ser necesarias pruebas de laboratorio adicionales, por ejemplo, 17-OH-progesterona, hormona foliculoestimulante, estradiol, prolactina o cortisol.
- relación LH:FSH elevada - normalmente, a más de 3:1; la LH sérica está elevada y la FSH es relativamente más baja que en un ciclo menstrual normal; medir en la primera semana del ciclo menstrual
- sin embargo, una relación LH:FSH elevada ya no se considera un criterio diagnóstico del SOP debido a su inconsistencia (1)
- también puede haber niveles elevados de androstenediona y altos niveles circulantes de estrona
Tenga en cuenta que los niveles séricos de testosterona en pacientes con SOP rara vez superan los 4,8 nmol/l. Si los niveles de testosterona son superiores a 4,8 nmol/l, se deben realizar más estudios endocrinológicos para excluir otras causas de hipersecreción de andrógenos (por ejemplo, síndrome de Cushing, tumores de la glándula suprarrenal o de ovario) (3).
Referencia: