Hay muy pocas personas que no puedan recibir vacunas que contengan tos ferina. En caso de duda, se debe pedir consejo a un pediatra especialista, al equipo local de cribado e inmunización o a un especialista en protección de la salud, en lugar de no administrar la vacuna.
Las vacunas que contienen tos ferina no deben administrarse a quienes hayan tenido
La anafilaxia confirmada es extremadamente rara. Los datos del Reino Unido, Canadá y Estados Unidos indican tasas de 0,65 a 3 casos de anafilaxia por millón de dosis de vacuna administradas.
La presencia de una afección neurológica no es una contraindicación para la vacunación. Cuando haya indicios de una afección neurológica en un niño, consulte "El Libro Verde" y/o pida consejo a un especialista.
Las enfermedades leves sin fiebre ni alteraciones sistémicas
Si una persona presenta un malestar agudo, debe posponerse la vacunación hasta que se haya recuperado por completo; de este modo se evita la confusión del diagnóstico diferencial de cualquier enfermedad aguda al atribuir erróneamente cualquier signo o síntoma a los efectos adversos de la vacuna.
Reacciones sistémicas y locales tras una vacunación anterior: antecedentes de una reacción sistémica o local grave o leve en las 72 horas siguientes a una vacuna anterior.
La inmunización con una vacuna que contenga tos ferina debe continuar tras una historia de (1):
Embarazo y lactancia.
Para una orientación más detallada, consulte "El Libro Verde".
Consulte el Resumen de las Características del Producto (RCP) antes de prescribir/administrar una vacuna que contenga tos ferina.
Referencia:
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