En general, la demencia puede describirse como un deterioro generalizado de la función mental, sin alteración de la consciencia.
Sospechar demencia cuando
- los familiares informan al médico de un deterioro de la memoria, pero el paciente lo niega (1)
- cuando se interroga al paciente, éste mira al cuidador en busca de una respuesta - el "signo de girar la cabeza" (2)
deterioro generalizado de la función mental. Se refiere a la pérdida de diversas capacidades en los ámbitos de:
- deterioro de la memoria -principalmente deterioro del aprendizaje de material nuevo o de la retención de información nueva (1), preguntas repetitivas, dificultad para recordar la hora o la fecha (2)
- fallo de otras áreas del funcionamiento cognitivo superior que afectará a las actividades diurnas normales y a las funciones ejecutivas (1,3) -
- dificultad para realizar tareas complejas
- dificultades de juicio y planificación, pensamiento analítico
- problemas para orientarse en lugares familiares (conciencia espacial) - deterioro del lenguaje
- alteraciones del lenguaje - problemas para expresarse o "perderse" en las conversaciones (1)
- comportamiento desafiante (síntomas conductuales y psicológicos de la demencia)
- depresión
- apatía
- agitación
- desinhibición
- psicosis (delirios o alucinaciones)
- deambulación
- agresividad
- incontinencia (4)
- el comportamiento desafiante se asocia con frecuencia a altos niveles de tensión y angustia para los cuidadores familiares y ha sido una causa común de ingresos en instituciones (4)
- las tareas básicas de autocuidado
Si la alteración de la consciencia está presente junto con un deterioro intelectual general, la afección se define como delirio o estado confusional agudo o subagudo.
El cuadro clínico en un momento dado viene determinado por:
- la personalidad previa y la dotación intelectual del paciente
- la naturaleza del proceso patológico y el estadio que haya alcanzado
Referencia: