El manejo del íleo paralítico se resume en la frase de manejo habitual en obstrucción: gotear y succionar, es decir.
- succión nasogástrica, utilizada sólo si es necesaria, es decir, debido a vómitos y distensión gástrica
- necesidad de líquidos por vía intravenosa
- se mantiene al paciente sin ingerir nada por la boca; se le pueden dar pequeños sorbos de agua para beber o cubitos de hielo para chupar
- comprobar y corregir cualquier trastorno de fluidos/electrolitos
- observar si hay signos de recuperación del íleo
- el tratamiento posterior depende de la causa del íleo: si el íleo persiste durante más de 4 días después de la operación, esto sugiere alguna otra causa que no sea sólo el íleo paralítico reflejo postoperatorio
- la colonoscopia permite descomprimir el intestino y, al mismo tiempo, establecer un diagnóstico concluyente
- si hay perforación cecal o si el estado general del paciente se deteriora, está indicada una caecostomía con inserción de un catéter de diámetro ancho
Páginas relacionadas
Crear una cuenta para añadir anotaciones a la página
Añada a esta página información que sería útil tener a mano durante una consulta, como una dirección web o un número de teléfono. Esta información se mostrará siempre que visite esta página