Debe tratarse la causa subyacente.
El objetivo del tratamiento es
- aliviar los síntomas del ojo seco y mejorar la calidad de vida
- normalizar la superficie ocular y la película lagrimal
- prevenir el daño corneal siempre que sea posible (1)
La educación del paciente y los sustitutos lagrimales se utilizan principalmente para tratar a los pacientes en atención primaria.
- educar al paciente sobre la naturaleza de la afección y aconsejarle sobre cómo evitar los factores agravantes, por ejemplo: medicación, evitar la exposición prolongada al ordenador o a la televisión (2)
NICE recomienda lo siguiente como tratamiento inicial del DES:
- revisar los tratamientos ya utilizados y su respuesta
- realizar las modificaciones necesarias en el entorno doméstico o laboral para minimizar la evaporación de las lágrimas, por ejemplo: uso del ordenador, humedad del aire, etc.
- revisar la medicación que pueda ser responsable o agravar los síntomas oculares
- los conservantes de los medicamentos oculares tópicos pueden causar síntomas
- medicamentos sistémicos como antihistamínicos, bloqueadores beta, terapia estrogénica, antidepresivos tricíclicos
- identificar enfermedades médicas o quirúrgicas subyacentes asociadas a los DES
- p. ej., conjuntivitis alérgica, blefaritis, síndrome de Sjögren, cirugía ocular o de párpados previa (3)
Suplementos lagrimales
- las lágrimas artificiales y los lubricantes oculares se han utilizado habitualmente para el tratamiento del DES
- proporcionan alivio temporal y suelen contener conservantes
- pueden incluir
- gotas - hipomelosa, alcohol polivinílico
- geles - viscotears
- pomadas - la pomada permanece en el saco conjuntival más tiempo que las gotas y, por lo tanto, es más eficaz como lubricante ocular
- en pacientes con síntomas de leves a moderados
- las lágrimas artificiales de venta libre pueden ser suficientes por sí solas
- utilizar una formulación menos viscosa al principio (la posibilidad de provocar escozor y visión borrosa es menor)
- gotas de uso común que contienen hipromelosa
- se requiere una aplicación frecuente, ya que el alivio que proporciona es temporal
- los productos más viscosos (que contienen carbómeros o alcohol polivinílico) pueden tolerarse peor, pero requieren menos aplicaciones
- las pomadas a base de parafina son más adecuadas para su uso por la noche, ya que pueden resultar incómodas y provocar visión borrosa
- en caso de síntomas graves, lágrimas artificiales sin conservantes, quizá con una pomada lubricante ocular para usar por la noche
- se puede considerar el uso de gotas de acetilcisteína en personas con mucosidad visible (2,3)
Otros tratamientos para el ojo seco incluyen
- antiinflamatorios tópicos
- corticosteroides - generalmente recomendados para uso a corto plazo
- ciclosporina A - recomendada como opción, dentro de su autorización de comercialización, para el tratamiento de la queratitis grave en pacientes adultos con enfermedad del ojo seco que no haya mejorado a pesar del tratamiento con sustitutos lagrimales (4)
- antibióticos - tetraciclinas y sus derivados
- el tratamiento tópico prolongado con antibióticos puede provocar reacciones tóxicas locales a los conservantes de las soluciones y favorecer el desarrollo de resistencia bacteriana
- colirios autólogos - elaborados con suero sanguíneo del propio paciente
- inserción de tapones lagrimales: para bloquear las glándulas lagrimales y evitar el drenaje nasolagrimal de las lágrimas del ojo (1,3)
- suplementación oral con ácidos grasos poliinsaturados (omega-3 y omega-6)
- nueve ensayos controlados aleatorizados doble ciego (con un total de 716 pacientes) han demostrado que la suplementación mejoraba la puntuación de los síntomas OSDI, aliviaba el ardor y el lagrimeo, y reducía la respuesta inflamatoria en la superficie ocular (3)
Los casos graves suelen tratarse en la atención secundaria (2).
Referencias: