Se trata de una forma idiopática de uveítis anterior que representa alrededor del 3% de todos los casos. Se trata esencialmente de una ciclitis con despigmentación del iris en el ojo afectado. Se desarrolla de forma insidiosa y suele afectar a adultos jóvenes en la tercera o cuarta década.
Característicamente, el paciente presenta una visión ligeramente nublada y manchas flotantes en un ojo. No hay enrojecimiento, dolor ni fotofobia. Los iris son de colores diferentes, pero esto puede no ser perceptible al principio o cuando el color normal del iris es gris o azul.
En el examen, pueden observarse precipitados queráticos translúcidos, no pigmentados, en la superficie corneal posterior. Pueden observarse partículas finas o células en la cámara anterior. El iris muestra atrofia estromal y cuando se transilumina a través de la pupila, se observa que el epitelio pigmentario tiene un aspecto apolillado en el margen pupilar. Las sinequias posteriores son raras.
La catarata se desarrolla en pocos años en el 15% de los casos, y el glaucoma secundario en el 10-15% de los casos. Puede haber una ligera ptosis y enoftalmos en el lado afectado.
El tratamiento antiinflamatorio con corticoides es ineficaz. El pronóstico visual suele ser bueno, ya que a menudo la catarata puede extirparse con seguridad a pesar de la uveítis activa de bajo grado.
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