Los cálculos en los dos tercios anteriores del conducto submandibular en el suelo de la boca se eliminan mediante dilatación ductal y masaje. Se coloca una sutura alrededor del conducto detrás del cálculo para elevar el conducto hacia arriba y evitar que el cálculo vuelva a caer fuera de su alcance. El cálculo se extrae tras realizar una incisión longitudinal en el conducto. La incisión se deja abierta para facilitar el drenaje. Debe advertirse al paciente de que existe una tasa de recurrencia del 20%.
Los cálculos en el hilio de la glándula submandibular requieren la extirpación de la glándula debido a su inaccesibilidad y a la tendencia postoperatoria de que la simple extracción del cálculo provoque una estenosis. Hay que tener cuidado para evitar dañar la rama mandibular del nervio facial.
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