La distrofia miotónica neonatal puede darse en niños nacidos de madres con distrofia miotónica.
Puede haber deformidad por contractura de las articulaciones -artrogriposis-, debilidad e hipotonía. Esto puede ser lo suficientemente grave como para afectar a la respiración y requerir apoyo.
Hasta tres cuartas partes de los niños gravemente afectados por esta enfermedad mueren en el primer año de vida. Sin embargo, si se les presta apoyo, el pronóstico es muy bueno.
A pesar de la creencia popular, la mejor forma de diagnosticar esta enfermedad no es estrechar la mano de la madre, lo que provocaría un agarre miotónico. Lo más útil es la electromiografía.
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