No existe un límite máximo para los opiáceos potentes en cuidados paliativos, pero si el dolor no se controla a pesar de aumentar rápidamente las dosis, debe considerarse la posibilidad de administrarlos:
- fractura o fractura inminente
- hipercalcemia, causa frecuente de empeoramiento del dolor óseo
- retención urinaria
- estreñimiento
- cumplimiento: a los pacientes puede no gustarles el opiáceo debido a náuseas, sedación, confusión, temores infundados o incertidumbre sobre la dosis
- falta de absorción, por ejemplo, vómitos
- origen neuropático del dolor
- patología nueva o de otro tipo, relacionada o no con el cáncer, como angina de pecho
- depresión o angustia psicológica
Páginas relacionadas
Crear una cuenta para añadir anotaciones a la página
Añada a esta página información que sería útil tener a mano durante una consulta, como una dirección web o un número de teléfono. Esta información se mostrará siempre que visite esta página