Las sales biliares facilitan la formación de micelas para la absorción de las grasas. Son el producto de la conjugación de los ácidos biliares con la taurina o la glicina.
Los ácidos biliares pueden dividirse en los producidos en el hígado -formas primarias- y los derivados de los ácidos biliares primarios por acción de las bacterias intestinales -formas secundarias-.
Los ácidos biliares primarios se transportan al árbol biliar por difusión pasiva mediada por transportadores. Pasan a la vesícula biliar, donde se concentran y almacenan en la bilis. Al contraerse la vesícula biliar, las sales biliares pasan al duodeno.
La mayor parte de las sales biliares se reabsorben en el intestino para volver al hígado (circulación enterohepática).
Una cantidad excesiva de sales biliares en la sangre puede provocar síntomas de prurito.
Añada a esta página información que sería útil tener a mano durante una consulta, como una dirección web o un número de teléfono. Esta información se mostrará siempre que visite esta página