Si se sospecha una exposición, debe iniciarse sin demora la profilaxis postexposición (PPE).
- es muy eficaz para evitar que el virus llegue al sistema nervioso.
- pueden seguirse varios regímenes postexposición aprobados por la OMS: incluye limpieza de heridas, seguida de PPE - inmunización activa con vacuna antirrábica, con o sin inmunización pasiva con inmunoglobulina antirrábica humana (HRIG).
- Ineficaz cuando se administra tras la aparición de los síntomas clínicos (1).
Tratamiento tras la exposición:
- paso 1 - tratamiento de la herida:
- el riesgo de desarrollar rabia puede reducirse en gran medida mediante la limpieza inmediata de la herida
- debe limpiarse cuidadosamente y desbridarse adecuadamente
- se recomienda un lavado minucioso con agua y jabón, detergente, povidona yodada u otras sustancias virucidas
- debe evitarse la contaminación o el agrandamiento de la herida
- el riesgo de infección es alto si la herida sangra
- debe infiltrarse inmunoglobulina antirrábica en la herida
- la herida debe dejarse abierta, ya que se han notificado fracasos de la profilaxis postexposición asociados a la reparación primaria.
- paso 2 - profilaxis posexposición (inmunoglobulina antirrábica y vacuna)
- cada caso requiere una evaluación completa del riesgo y, si está indicada, la vacunación debe iniciarse inmediatamente
- puede ser necesario iniciar el tratamiento antes de disponer de información completa sobre la propiedad y el estado del animal que mordió
- la evaluación del riesgo debe realizarse siempre, aunque la exposición se haya producido muchos meses o años antes
- debe considerarse el tratamiento incluso si el intervalo desde la exposición es largo (ya que el periodo de incubación de la rabia puede ser prolongado) (2)
- dependiendo de la gravedad del contacto que se administre con el animal sospechoso de rabia, se recomienda la administración de profilaxis posexposición (véanse las categorías de contacto y la profilaxis posexposición recomendada)
- la vacuna y la HRIG NUNCA deben administrarse en el mismo lugar anatómico
Manejo tras el desarrollo de los síntomas
- la muerte es casi siempre inevitable en pacientes que desarrollan signos y síntomas neurológicos debido al fracaso del tratamiento o a la no inmunización
- sólo se recomiendan medidas de apoyo
- se recomiendan medidas paliativas como la sedación y el apoyo físico y emocional, ya que los pacientes tienden a estar muy agitados y ansiosos
- puede ser necesario el apoyo respiratorio, cardiovascular y nutricional.
- la profilaxis postexposición no es necesaria para los contactos hospitalarios de pacientes con rabia (a menos que sean mordidos o que sus mucosas o cualquier herida abierta entren en contacto con la saliva, el líquido cefalorraquídeo o el tejido cerebral de los pacientes afectados)
Tratamiento antes de la exposición:
- recomendado para las personas con riesgo de rabia - detalles en la vacunación antirrábica.
Referencia: