El NICE ha definido la preeclampsia como (1):
- nueva aparición de hipertensión (más de 140 mmHg sistólica o más de 90 mmHg diastólica) después de 20 semanas de embarazo y la coexistencia de 1 o más de las siguientes afecciones de nueva aparición:
- proteinuria (relación proteínas:creatinina en orina igual o superior a 30 mg/mmol o relación albúmina:creatinina igual o superior a 8 mg/mmol, o al menos 1 g/litro [2+] en la prueba con tira reactiva) o
- otras disfunciones orgánicas maternas:
- insuficiencia renal (creatinina igual o superior a 90 micromol/litro, igual o superior a 1,02 mg/100 ml)
- afectación hepática (transaminasas elevadas [alanina aminotransferasa o aspartato aminotransferasa por encima de 40 UI/litro] con o sin dolor abdominal en el cuadrante superior derecho o epigástrico)
- complicaciones neurológicas como eclampsia, alteración del estado mental, ceguera, accidente cerebrovascular, clonus, cefaleas intensas o escotomas visuales persistentes
- complicaciones hematológicas como trombocitopenia (recuento de plaquetas inferior a 150.000/microlitro), coagulación intravascular diseminada o hemólisis
- disfunción uteroplacentaria, como retraso del crecimiento fetal, anomalías en el análisis de la onda doppler de la arteria umbilical o mortinatalidad
Preeclampsia grave
- Preeclampsia con hipertensión grave que no responde al tratamiento o se asocia a cefaleas intensas continuas o recurrentes, escotomas visuales, náuseas o vómitos, dolor epigástrico, oliguria e hipertensión grave, así como a un deterioro progresivo de los análisis de sangre, como un aumento de la creatinina o de las transaminasas hepáticas o un descenso del recuento de plaquetas, o un retraso del crecimiento fetal o hallazgos doppler anormales.
Evaluación de la preeclampsia:
La evaluación de las mujeres con preeclampsia debe ser realizada por un profesional sanitario formado en el tratamiento de los trastornos hipertensivos del embarazo.
Llevar a cabo una evaluación clínica completa en cada cita prenatal para mujeres con preeclampsia, y ofrecer ingreso hospitalario para vigilancia y cualquier intervención necesaria si existe preocupación por el bienestar de la mujer o el bebé. Los motivos de preocupación pueden ser los siguientes
- presión arterial sistólica sostenida de 160 mmHg o superior
- cualquier estudio bioquímico o hematológico de la madre que suscite preocupación, por ejemplo, un nuevo y persistente
- aumento de la creatinina (90 micromol/litro o más, 1 mg/100 ml o más) o
- aumento de la alanina transaminasa (más de 70 UI/l, o el doble del límite superior del intervalo normal) o
- descenso del recuento de plaquetas (inferior a 150.000/microlitro)
- Signos de eclampsia inminente: trastorno convulsivo asociado a la preeclampsia.
- signos de edema pulmonar inminente
- otros signos de preeclampsia grave
- preeclampsia con hipertensión grave que no responde al tratamiento o se asocia a cefaleas intensas continuas o recurrentes, escotomas visuales, náuseas o vómitos, dolor epigástrico, oliguria e hipertensión grave, así como a un deterioro progresivo de los análisis de sangre, como un aumento de la creatinina o de las transaminasas hepáticas o un descenso del recuento de plaquetas, o un retraso del crecimiento fetal o hallazgos doppler anormales
- sospecha de compromiso fetal
- cualquier otro signo clínico preocupante
Considerar el uso de los modelos validados de predicción del riesgo fullPIERS o PREP-S para ayudar a orientar las decisiones sobre el lugar de atención más adecuado (como la necesidad de traslado in utero) y los umbrales de intervención.
Cuando utilice un modelo de predicción de riesgos, tenga en cuenta que
- fullPIERS puede utilizarse en cualquier momento del embarazo
- PREP-S está pensado para utilizarse sólo hasta las 34 semanas de embarazo
- los modelos fullPIERS y PREP-S no predicen los resultados para los bebés
NICE sugiere una metodología para la medición de la tensión arterial durante el embarazo (2)
- quítese la ropa ajustada, asegúrese de que el brazo está relajado y apoyado a la altura del corazón
- utilizar un manguito del tamaño adecuado
- inflar el manguito hasta 20-30 mmHg por encima de la presión arterial sistólica palpada
- bajar la columna lentamente, 2 mmHg por segundo o por latido
- leer la tensión arterial con una precisión de 2 mmHg
- medir la presión arterial diastólica cuando desaparezcan los sonidos (fase V).
Referencia: