Tratamiento

Debe establecerse claramente la causa de la ferropenia y corregirse cualquier causa subyacente para evitar una mayor pérdida de hierro (1).

El objetivo principal del tratamiento con hierro es restablecer la concentración de hemoglobina y los índices de eritrocitos a niveles normales y reponer las reservas de hierro (1).

La ferropenia suele tratarse con suplementos orales de hierro. Aconsejar al paciente sobre alimentos ricos en hierro puede ser suficiente, aunque a menudo se prescribe hierro a los pacientes.

Terapia con hierro intravenoso (2):

• el uso de la terapia de sustitución de hierro intravenoso evita el eje hepcidina-ferroportina, el tratamiento tiene un efecto clínico mejorado en el contexto de la inflamación, y no tiene los mismos efectos secundarios gastrointestinales del hierro oral
• antes, los preparados de hierro parenteral eran muy lábiles y propensos a la liberación excesiva de hierro libre en la circulación, con el consiguiente riesgo de efectos secundarios
  • el desarrollo de nuevos preparados de alto peso molecular y más estables ha reducido notablemente la incidencia de estos efectos (2)
  • por lo tanto, la administración de hierro parenteral está cada vez más extendida

La transfusión de sangre suele considerarse para pacientes con anemia sintomática a pesar del tratamiento con hierro o con riesgo de inestabilidad cardiovascular debido a su grado de anemia. El objetivo de la transfusión debe ser restablecer la hemoglobina a un nivel seguro (no necesariamente a niveles normales) y, a continuación, seguir un tratamiento con hierro para reponer las reservas (1).

Referencias:

• (1) Goddard AF et al. Directrices para el tratamiento de la anemia ferropénica. Gut. 2011;60(10):1309-16.
• (2) Avni T et al. La seguridad de los preparados de hierro intravenoso: revisión sistemática y metaanálisis. Mayo Clinic Proc. 2015 Jan;90(1):12-23