La desintoxicación de opiáceos es el proceso mediante el cual se eliminan los efectos de las drogas opiáceas de los consumidores dependientes de opiáceos de forma segura y eficaz, minimizando los síntomas de abstinencia.
- la desintoxicación de opiáceos puede llevarse a cabo utilizando la misma droga u otro opiáceo en dosis decrecientes, y puede ser asistida por la prescripción de medicamentos adyuvantes para reducir los síntomas de abstinencia
La metadona puede utilizarse en el tratamiento del abuso de opiáceos, ya que tiene una larga duración de acción que permite que la dosis oral diaria mantenga los niveles de opiáceos en sangre dentro de los límites deseados. Tenga en cuenta que el jarabe de metadona no es apto para inyección.
- La metadona o la buprenorfina deben ofrecerse como tratamiento de primera línea en la desintoxicación de opiáceos. A la hora de decidir entre estos medicamentos, los profesionales sanitarios deben tener en cuenta
- si el usuario del servicio está recibiendo tratamiento de mantenimiento con metadona o buprenorfina; si es así, la desintoxicación de opiáceos debe iniciarse normalmente con la misma medicación
- la preferencia del usuario del servicio
- la lofexidina puede considerarse para las personas
- que hayan tomado una decisión informada y clínicamente apropiada de no utilizar metadona o buprenorfina para la desintoxicación
- que hayan tomado una decisión informada y clínicamente apropiada de desintoxicarse en un plazo corto de tiempo
- con dependencia leve o incierta (incluidos los jóvenes)
- la clonidina no debe utilizarse de forma rutinaria en la desintoxicación de opiáceos
- la dihidrocodeína no debe utilizarse sistemáticamente en la desintoxicación de opiáceos
- la duración de la desintoxicación de opiáceos debe ser normalmente de hasta 4 semanas en un entorno hospitalario/residencial y de hasta 12 semanas en un entorno comunitario
Notas (2):
- en el caso de las mujeres dependientes de opiáceos durante el embarazo, la desintoxicación sólo debe realizarse con precaución
- abuso de alcohol y desintoxicación de opiáceos
- si una persona que se presenta para desintoxicarse de opiáceos también abusa del alcohol, los profesionales sanitarios deben tener en cuenta lo siguiente
- si la persona no es dependiente del alcohol, se debe intentar abordar su consumo abusivo de alcohol
- si la persona no es dependiente del alcohol, se debe intentar abordar su consumo de alcohol, ya que puede aumentar como respuesta a los síntomas de abstinencia de opiáceos, o sustituir el consumo anterior de opiáceos por alcohol
- si la persona es dependiente del alcohol, debe ofrecerse una desintoxicación del alcohol
- debe llevarse a cabo antes de iniciar la desintoxicación de opiáceos en un entorno comunitario o penitenciario, pero puede realizarse simultáneamente con la desintoxicación de opiáceos en un entorno hospitalario o con la estabilización en un entorno comunitario
- abuso de benzodiacepinas y desintoxicación de opiáceos
- Si una persona que se presenta para someterse a una desintoxicación de opiáceos es también dependiente de las benzodiacepinas, los profesionales sanitarios deberían considerar la posibilidad de llevar a cabo una desintoxicación de las benzodiacepinas. A la hora de decidir si esta desintoxicación debe llevarse a cabo de forma simultánea o separada de la desintoxicación de opiáceos, los profesionales sanitarios deben tener en cuenta las preferencias de la persona y la gravedad de la dependencia de ambas sustancias.
Referencia:
- Prescribers' Journal (2000); 40 (2): 67-76.
- NICE (julio de 2007).Drug misuse - Opioid detoxification.